Cada 18 de julio se celebra el Día Internacional de Nelson Mandela con motivo de rendir homenaje al líder en el día de su nacimiento. Activista contra el apartheid, político y abogado, fue presidente de Sudáfrica luego de estar detenido durante 27 años.
En noviembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 18 de julio “Día Internacional de Nelson Mandela” en reconocimiento al activista y sus aportes a la cultura de la paz, la libertad y la democracia.
Debido a su lucha por los derechos humanos y en contra del apartheid, fue detenido en distintas oportunidades. En 1963 comenzó el encarcelamiento que lo tendría confinado durante 27 años, 18 de los cuales transcurrieron en la Isla de Robben en donde Mandela fue obligado a realizar trabajos forzados, además de ser víctima de violencia física y verse impedido de leer las noticias e incluso de recibir visitas.
Su trabajo por la paz social y la unidad le valió el reconocimiento internacional y en 1993 recibió el Premio Nobel de la Paz. En 1994 logró que se celebraran las primeras elecciones democráticas en la historia de su país, en las cuales fue electo presidente de Sudáfrica. Nelson Rolihlahla Mandela falleció el 5 de diciembre de 2013.
¿Qué son las Reglas Mandela?
Las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos son un conjunto de normas elaboradas por las Naciones Unidas en 1955 para establecer parámetros internacionales con respecto al tratamiento de las personas privadas de libertad y el respeto de sus derechos humanos. El 17 de diciembre de 2015, y en honor a Mandela, cambiaron su nombre por Reglas Mandela.
El documento constituye la formalización de los estándares mínimos para la gestión de los centros penitenciarios de detención y la elaboración de políticas públicas.
Principios Fundamentales
Las Reglas se aplicarán de forma imparcial y sin discriminación.
- El sistema penitenciario no deberá agravar los sufrimientos que implican la privación de la libertad y el despojo del derecho a la autodeterminación de las personas detenidas.
- Todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y su valor intrínseco en cuanto seres humanos.
- Nadie será sometido a tortura ni a tratos crueles, inhumanos o degradantes.
- Se tendrán en cuenta las necesidades individuales de los reclusos, en particular las de las categorías más vulnerables en el contexto penitenciario.
- Se deberán reducir al mínimo las diferencias entre la vida en prisión y la vida en libertad.
- Las medidas privativas de libertad tienen por objetivo proteger a la sociedad contra el delito y reducir la reincidencia. Esos objetivos sólo pueden lograrse si se ofrece a las personas presas educación, salud, formación profesional y trabajo, así como otras formas de asistencia apropiadas que brinden herramientas para lograr su reinserción en la sociedad tras su puesta en libertad.
En este sentido y ante el escenario planteado por el coronavirus COVID-19, la PPN ha trabajado arduamente en la presentación de recomendaciones para afrontar la emergencia sanitaria en los centros de detención teniendo como modelo las REGLAS MANDELA.
Asimismo, en el mes de mayo se elaboró un informe que nuclea las acciones de distintos países y las medidas alternativas a la prisión que se adoptaron para enfrentar la pandemia.
Fuente:PPN Procuración Penitenciaria de la Nación.