En la columna quincenal del Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad (OTES), analizaron la intervención y expropiación de Vicentin junto a los diversos actores que atraviesan esta situación.
En este marco, Gonzalo Ávila, integrante de OTES, dijo: «Me parece que estamos justo en un momento en donde todos los actores se están moviendo. El jueves el Gobierno provincial con el Instituto de Inspección de Personas Jurídicas, que era quienes llevan a cabo esta nueva medida de intentar meter un vocal nuevo, el estado nacional con su intervención, principio de expropiación, pero que ahora están como intentando ver que esta pasando, como dando un par de pasos para atras».
«En Córdoba este panorama esta copando las noticias, todo el mundo está hablando y se está debatiendo, se están moviendo diferentes sectores de la sociedad. Me parece que eso también toma mucho vuelo y en particular, ahí me parece que es importante decir que hay una parte del Gobierno que se está moviendo, básicamente de alguna manera por el lado de la posición de este juez, como bancando al grupo Vicentin, no a la intervención y la expropiación, en articular las declaraciones de los diputados, senadores y senadoras de Hcemos Por Córdoba, que dijeron que en caso de que la ley de expropiación llegue al Congreso, que ellos iban a votar en contra. Esto es algo que se dijo ni bien estuvo o empezó el debate de Vicentin, ahí el Gobierno tuvo una reacción rápida, de decir nosotros no vamos a ir en esa línea, vamos a ir por otro lado».
«A la par, vemos que, sobre todo en Córdoba hubo como marcha en apoyo al grupo Vicentin y este miércoles hubo a la vez un cierto movimiento de las organizaciones sociales y los sindicatos bancando la expropiación. La frutilla del postre de todos estos movimientos me parece que fue en estos últimos días el representante de la sociedad rural, diciendo que para él lo que había que hacer era intervenir la empresa. No lo dijo así específicamente, pero básicamente no estaba defendiendo al grupo Vicentin, sino defendió a la cantidad de productores que Vicentin dejó al borde de la quierbra, por no pagarle a causa de los granos que ellos le vendieron al grupo empresario Vicentin, para la posterior exportación. Entonces me parece que en Córdoba también hay algo muy interesante para poder pensar en torno de que manera afecta la situación de Vicentin, sobre todo a la producción, el movimiento de organizaciones y sectores sociales, y que debate está abriendo este tema», señalaba Avila.
A continuación escuchá la nota completa del Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad.