La Capilla Nuestra Señora de Lourdes se ha convertido en el epicentro de múltiples actividades deportivas, sociales y culturales que fortalecen los lazos entre los vecinos. Desde rugby y fútbol hasta talleres de murga y encuentros de mujeres, la comunidad genera sus propios espacios de contención y desarrollo.
En el barrio de Argüello Lourdes, la vida comunitaria gira en torno a un punto de encuentro clave: la Capilla Nuestra Señora de Lourdes. Lejos de ser solo un espacio para la catequesis, este lugar se ha transformado en un vibrante centro de actividades que convoca a niños, jóvenes y adultos, demostrando cómo la organización vecinal y las redes de colaboración son fundamentales para el desarrollo del barrio.
Una de las iniciativas más consolidadas es el Lourdes Rugby Club, que desde hace más de diez años utiliza las instalaciones de la capilla para sus entrenamientos los lunes y miércoles. Este club, que cuenta con su propia página en Facebook, ofrece a chicos y chicas la oportunidad de aprender y competir en este deporte. Del mismo modo, el predio es utilizado por la escuelita de fútbol «Las estrellas de Lourdes», un proyecto que incluso ha permitido a sus jóvenes talentos viajar a Chile para probarse en otros clubes.
El compromiso social también tiene un lugar destacado. «El roperito de la María» funciona en Casa Macuca, un espacio cercano donde los jueves por la tarde se ofrece ropa a la comunidad. Este mismo lugar es sede de encuentros de mujeres, que cuentan con el apoyo de una psicóloga para generar un espacio de charla y contención. Además, la dicho espacio también acoge un taller de murga los miércoles, preparando a los más jóvenes para la gran fiesta de carnaval que se celebra cada año en el barrio. Este taller también tiene lugar los viernes en Las Aldeas, buscando ampliar su convocatoria.
Cecilia, catequista de la capilla y vecina desde hace 24 años, destaca que estas iniciativas son parte de una red más amplia que busca mantener a la comunidad informada y conectada, compartiendo actividades que se realizan también en el centro de salud y en las escuelas. Según los testimonios, es gracias a estas redes, amistades y gente que busca permanentemente el buen vivir que el barrio ha logrado sobreponerse a situaciones de abandono estatal. Con el apoyo de referentes como el padre Daniel, la comunidad de Argüello Lourdes sigue demostrando que la unión y la colaboración son sus herramientas más valiosas para estar mejor.