El diputado nacional y candidato de La Libertad Avanza, José Luis Espert, difundió un extenso video para dar “explicaciones de frente y con total sinceridad” sobre las denuncias que lo vinculan con el empresario detenido por narcotráfico, Federico “Fred” Machado. En su mensaje, el economista admitió haber sido “ingenuo”, pero negó categóricamente ser un “delincuente”, intentando despejar las dudas en torno a los 200.000 dólares que recibió y que lo pusieron en el centro de la polémica.
Según Espert, todo se trata de una “campaña sucia” iniciada por Juan Grabois, en plena campaña electoral. El libertario afirmó que su único vínculo con Machado fue como consultor económico, una vez finalizada la campaña presidencial de 2019, y que no existe ninguna relación ilícita. “Nosotros somos distintos, no somos como ellos”, aseguró.
El economista relató que conoció a Machado a través de un tercero, quien lo presentó como un “empresario exitoso y admirador del proyecto liberal”. En 2019, Machado le ofreció trasladarlo en su avión privado para una presentación de libro en Viena y fue “uno de los tantos que ayudaron en la campaña presidencial”. Sin embargo, Espert marcó una diferencia entre ese apoyo logístico y la cuestionada transferencia de fondos.
Según su versión, Machado lo conectó con la empresa minera guatemalteca Minas del Pueblo, que necesitaba asesoramiento para reestructurar una deuda. En enero de 2020, tras firmar un contrato de consultoría, Espert comenzó a trabajar en el proyecto. “A principio de febrero de ese año, reitero, terminada la elección y totalmente dedicado a mi actividad privada de consultor, recibí un adelanto en virtud de ese contrato”, explicó.
Respecto a los 200.000 dólares, Espert remarcó que la operación fue “totalmente transparente y legal”. El dinero ingresó en una cuenta a su nombre en Estados Unidos, declarada en Argentina, y con la condición de que el pago se realizara por transferencia bancaria en el sistema norteamericano. “Cuando uno recibe un pago en Estados Unidos, lo hace dentro de uno de los sistemas más controlados y estrictos del mundo”, argumentó.
El diputado insistió en que “no se trató de un pago del señor Machado”, sino de una empresa que solicitó sus servicios profesionales. Sin embargo, el trabajo no prosperó debido a la irrupción de la pandemia de COVID-19, que impidió su traslado a Guatemala.
Espert también confesó que recién en abril de 2021 se enteró, “por los medios”, del pedido de captura internacional contra Machado. “Entré en pánico. Nunca imaginé que podía pasarme una cosa así en mi vida”, dijo. Y agregó: “No tenía la menor idea y nunca la tuve de estas supuestas actividades ilícitas del señor Machado, que se hicieron públicas mucho después de concluir mi relación contractual”.
En un tono enfático, resumió su defensa en una frase: “Puedo haber pecado de ingenuo, pero delincuente jamás”.
Finalmente, el candidato libertario apuntó contra Juan Grabois, a quien acusó de “repetir una campaña sucia de hace cuatro años” y de “meterse con su familia” al cuestionar un supuesto crecimiento patrimonial. Según Espert, ese incremento se debe a la herencia de un campo de su padre fallecido en 2018 y no a maniobras irregulares.
