El acusado, de 28 años, arribó el jueves por la noche a la Argentina en un avión de la Fuerza Aérea, bajo un fuerte operativo de seguridad. Viajaba escoltado por siete agentes de la Policía Federal y cinco efectivos de la Policía Bonaerense. La aeronave partió de El Palomar a las 11, realizó una escala técnica en Salta y luego aterrizó en Lima cerca de las 17, donde se concretaron los trámites de expulsión. Con Ozorio a bordo, el vuelo regresó al país y volvió a detenerse en Salta para cargar combustible antes de arribar a las 23.11 a la terminal aérea bonaerense.
Tras pasar la noche en la Jefatura Departamental de La Matanza, este viernes Ozorio será indagado por el fiscal de Homicidios de ese distrito, Carlos Adrián Arribas. Según confirmaron fuentes judiciales, el procedimiento tendrá lugar en el Polo Judicial de San Justo, donde ya se montó un amplio despliegue de seguridad que podría afectar el tránsito de la zona.
Al mismo tiempo, la Justicia ordenó la apertura de todos los teléfonos celulares secuestrados en el marco de la causa. Las autoridades adelantaron que los dispositivos podrán ser peritados sin inconvenientes, lo que podría aportar información clave para el avance de la investigación.
Ozorio está acusado de ser uno de los principales colaboradores de Pequeño J, señalado como instigador del crimen de Brenda Del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez.
