Saravia explicó que, aunque Jara pertenece al Partido Comunista, “tiene posiciones de centro izquierda”. La candidata gubernamental obtuvo 27% de los votos, mientras que Kast alcanzó 24%. Según el analista, el resultado fue “un mal resultado para el oficialismo” porque esperaba superar el 30%, mientras que la extrema derecha terminó rindiendo por encima de lo que marcaban las encuestas.
El resto de los postulantes también configura un escenario complejo para el oficialismo, según Saravia. Recordó que Franco Parisi —a quien definió como “una derecha populista”— obtuvo 20%, Johannes Kaiser —“le llaman el Milei chileno”— llegó al 14%, y Evelyn Matei, representante de la “derecha tradicional”, sumó 13%. Saravia sostuvo que “todos se supone van a terminar apoyando a José Antonio Kast”, lo que dificultaría cualquier intento del oficialismo por frenar su avance.
El periodista alertó sobre el perfil del candidato que lidera ese espacio. Remarcó que Kast “reivindica a Pinochet” y recordó que “su padre fue un miembro de las juventudes hitlerianas en Alemania”. Para Saravia, este fenómeno marca el regreso de “una derecha tan extrema” en un país que dejó atrás la dictadura hace 35 años. La comparó con la derecha de Sebastián Piñera, a la que describió como “tendiente al neoliberalismo pero que jugaba dentro de los límites de la democracia burguesa”, similar a “la de Macri” o “la de Aznar en España”. “Esto es otra cosa”, afirmó.
Saravia señaló que la propuesta central de Kast es “echar a todos los inmigrantes indocumentados”, particularmente venezolanos, además de promover “mano dura, etcétera, etcétera, etcétera”, posiciones que, según dijo, “cruzan algunos límites propios de la democracia”. También observó que el candidato habló el domingo “prácticamente probándose el saco de presidente”, agradeciendo a Dios y asegurando que el triunfo final llegará “cuando cierren las fronteras, cuando aíslen aún más a Chile”. En ese discurso, pidió “aplausos y vivas a los carabineros, a las Fuerzas Armadas” y anunció “una amnistía a los carabineros que reprimieron la protesta social de octubre del 2019”.
La elección, evaluó Saravia, funcionó como “una primaria de la derecha”, entre otras cosas por la implementación del voto obligatorio, que llevó a que votara “más del 86% del padrón”. Con ese nivel de participación, consideró que una eventual estrategia de Yaneth Jara para conquistar a quienes no votaron tiene un margen limitado: “son muy poquitos”.
Con un mes de campaña por delante, Saravia planteó que habrá que observar cómo se encamina “el país trasandino, el país hermano de Chile”, de cara a un balotaje que definirá si el país logra contener o no “a esta extrema derecha verdaderamente peligrosa”. “Un abrazo y hasta la próxima”, cerró su columna.
Escuchá la columna completa con Mariano Saravia acá:
LA DESPENSA. Lunes a viernes de 9 a 12hs, con Emilia Calderón.

