La actividad metalúrgica volvió a mostrar señales negativas en noviembre, con una contracción interanual del 4,2% y una baja adicional de 0,3% respecto de octubre, de acuerdo con el último informe difundido por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA).
El desempeño del anteúltimo mes del año confirmó la persistencia de una tendencia recesiva que se mantiene desde hace más de un año. Incluso luego de un octubre negativo, la actividad volvió a caer, profundizando un escenario de fragilidad productiva que atraviesa a gran parte de la industria.
Uno de los datos más alarmantes es el nivel de utilización de la capacidad instalada, que en noviembre se ubicó en apenas 44,4%. Se trata de un registro similar al observado entre marzo y junio de 2020, en pleno impacto de la pandemia, lo que refleja la magnitud del freno en la producción.
El relevamiento sectorial mostró caídas generalizadas en casi todos los rubros considerados estratégicos. La fundición encabezó los descensos con una baja del 18,2%, seguida por autopartes (-4,8%), equipos y aparatos eléctricos (-3,4%), bienes de capital (-3,4%) y maquinaria agrícola (-2,6%). La única excepción fue carrocerías y remolques, que registró un incremento del 3,1%.
Desde ADIMRA advirtieron que este comportamiento confirma un escenario recesivo sostenido, con importaciones en ascenso, bajos niveles de actividad y sin señales claras de recuperación en el corto plazo. En ese sentido, el presidente de la entidad, Elio Del Re, alertó sobre el deterioro del entramado productivo metalúrgico y remarcó la necesidad de una política industrial integral que permita revertir una situación que calificó como “extremadamente preocupante” para las pymes del sector.
El impacto negativo también se reflejó a nivel regional. Las principales provincias metalúrgicas registraron caídas en su actividad durante noviembre, con descensos del 5,6% tanto en Buenos Aires como en Córdoba, del 1,8% en Mendoza y del 1,5% en Santa Fe y Entre Ríos.
En materia de empleo, el informe señaló una disminución interanual del 3,3% en los puestos de trabajo del sector, mientras que en la comparación mensual con octubre la baja fue del 0,4%, lo que refuerza la preocupación por el efecto de la retracción productiva sobre el mercado laboral.
A este panorama se suma el crecimiento sostenido de las importaciones de productos metalúrgicos. En octubre, último dato disponible, las compras externas alcanzaron los 2.656 millones de dólares, con subas interanuales del 11,8% en valor y del 33,4% en volumen. Además, desde junio de 2024 las importaciones crecen a un ritmo mensual promedio del 5%.
En contraste, las exportaciones del sector totalizaron 454 millones de dólares y mostraron una caída interanual del 7,1%, lo que profundiza el desequilibrio comercial y refuerza las advertencias del sector sobre la necesidad de medidas que protejan y reactiven la producción nacional.

