El 18 de julio de 1994, una bomba estalló frente a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), del barrio porteño de Once, y dejó 85 víctimas fatales y más de 300 heridos. Al día de hoy, ninguna persona fue condenada por el atentado.
El 18 de julio de 1994, a las 9:53, un coche bomba estalló en la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). Desde ese día y cada aniversario a esa hora exacta, suena una sirena para conmemorar a las 85 víctimas fatales del atentado, sus familiares y los más de 300 heridos que aún cargan con las huellas de ese acto de terrorismo.
Este jueves, bajo la consigna «El terrorismo sigue, la impunidad también», se renovará el pedido de justicia. El presidente Javier Milei asistirá al acto que se realiza cada año, en conmemoración al aniversario número 30 del atentado contra la sede de la AMIA. Los oradores serán el presidente de la mutual judía, Amos Linetzky, y un grupo de familiares de las víctimas fatales del ataque.
Al día de hoy, ninguna persona ha sido condenada por el atentado, que fue acreditado por la justicia argentina a manos de integrantes de la organización chiíta libanesa Hezbollah, y una conexión local. A través de un fallo dictado en abril de este año por la Cámara de Casación Penal, se declaró al atentado contra la sede de la AMIA como un “crimen de lesa humanidad”, que supuso una grave violación a los derechos humanos.
Foto: gentileza Infobae