A casi dos años de la sanción de la Ley de regularización dominial para la integración urbana, reflexionamos acera de la situación de los barrios populares de Córdoba.
Las organizaciones sociales, caminaron un largo recorrido de lucha y organización que posibilitó llevar adelante un Relevamiento Nacional de Barrios Populares (ReNaBaP). La intención fue conocer la realidad de los asentamientos populares: cuántos había en la Argentina, cuántas personas viven en ellos y con qué servicios básicos cuentan o a qué programas sociales acceden.
Tras el relevamiento de aproximadamente 4500 barrios populares en el país, se logró la sanción de la Ley Nacional de regularización dominial para la integración socio urbana, en el año 2018. Esta declara la utilidad pública y sujeto a expropiación los inmuebles en los que se asientan los barrios populares relevados y cuya propiedad no sea del Estado Nacional. La ley prevé que las familias obtengan un plan de pago ajustado a su realidad económica y sus posibilidades.
Dos años después de este gran victoria para los movimientos populares, analizamos con Marco Galán la situación de los barrios populares en Córdoba: «La ley permite incorporar nuevos barrios a partir de 2018, pero aún no estamos notando que haya anuncios significativos a nivel nacional, como provincial o municipal; para atender la situación de desesperación que muchas familias tienen y que terminan ocupando tierras» manifestó Galán y agregó: «Estamos en una situación con un grado de complejidad, donde no hay ingresos y muchas familias se ven en una difícil situación de hábitat, ya que los desalojos que se congelan son aquellos que están pactados por inmobiliaria. Y acá hay un mercado informal de la vivienda y de muchísimos alquileres que no están regulados en el marco de la ley de alquileres, donde se están llevando a cabo desalojos de manera indiscriminada«.
Para finalizar, Marco se refirió a que pasos se deberían llevar adelante de cara a la integración urbana: «Necesitamos que hagan intervenciones urgentes para mejorar las viviendas que hay en los asentamientos, en los casos que sea posible y construir nuevas en otros, porque en algunos casos la gente está vivienda en condiciones mas que precarias. Me parece que lo que hace falta es que la situación de los barrios sean una prioridad.»