Los almacenes son una alternativa real al esquema de comercialización convencional, acortando las distancias entre productores y consumidores. Ofrecen frutas, verduras, lácteos, productos de almacén y productos cooperativos, de una red de Familias Trabajadoras de la tierra y cooperativas de todo el país.
Los precios de venta los discuten y fijan mediante asambleas, donde las familias trabajadoras de la tierra son el principal actor. Los precios los definen por temporada y duran 4 meses. Es decir que se corren del juego de la oferta y la demanda del mercado.
Por este motivo conversamos con Emilia Solfanelli, delegada de la Unión de Trabajadores de la Tierra Córdoba quien manifestó: «Tenemos nodos de comercialización que son puntos de venta y están buenos porque se involucran a otras organizaciones sociales o alguna familia u otra despensita. Los nodos comercializan bolsones de verduras, yerbas, quesos, chacinados de Colonia Caroya, todos productos de la agricultura familiar».
«Los nodos compran a un precio justo y comercializan a un precio justo», aseguró Solfanelli
Consultada sobre cómo se vinculan con las políticas públicas la delegada señaló: «no hay una política publica que acompañe la promoción de la agricultura familia como si hay programas de incentivo de comercialización».
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