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Caso Argüello: “Las pruebas contrarrestaron las afirmaciones falsas de las supuestas víctimas”

Iván Mochkofsky, abogado defensor del líder evangélico que recuperó su libertad y de los otros imputados en la causa, expresó su satisfacción por la resolución adoptada por el Juzgado Federal de San Francisco.

El abogado defensor de Elías Argüello y del resto de los imputados en la causa por la que el pastor evangélico estuvo más de dos meses detenido por presunta trata de personas con fines de explotación laboral por la que recibió la falta de mérito, consideró que las pruebas que se presentaron ante el Juzgado Federal derribaron las «falsas afirmaciones» de las supuestas víctimas que declararon.

El letrado Iván Mochkofsky aseguró que la Cámara Gesell y las imágenes aportadas por la defensa fueron claves para que se dicte la falta de mérito. Dijo que Argüello sufrió mucho mientras estaba privado de su libertad porque el daño que se produjo ante la opinión pública es grande, pero que regresará a hacer su vida como lo venía haciendo porque sus convicciones y creencia religiosa son firmes.

«Estas causas suelen ser muy largas, tarda mucho tiempo producirse la prueba. Además, por la gravedad de las imputaciones generalmente pueden tener a una persona mucho tiempo privada de la libertad hasta que dilucidar en otra instancia, como puede ser un juicio, si existieron o no los hechos y la responsabilidad de los defendidos. Acá, afortunadamente, por un accionar rápido de parte de la defensa y del juez que evaluó el material probatorio con celeridad y tomó la resolución que correspondía, la más justa, que es la falta de mérito», expresó Mochkofsky.

Para el abogado, el resultado de la Cámara Gesell fue determinante: «Consiste en una testimonial que se toma con la participación de un psicólogo que aporta el Estado. Esto debido al estado de vulnerabilidad de las víctimas, como sucede con los niños. Para no exponerlos a las preguntas de un fiscal o un abogado, se les pregunta a través de un psicólogo. En este caso, las primeras 5 supuestas víctimas declararon todas de manera coherente, congruente y fluida en favor de mis defendidos. Contaron cómo es su vida en comunidad, el trabajo, la vida diaria, el ocio, los viajes, los gustos que se dan, etc. Todo en congruencia con la hipótesis de la defensa».

Sobre ello agregó: «Las restantes dos supuestas víctimas, que son las que originaron este proceso como denunciantes, son las que hablaron en contra de mis defendidos. A continuación se presentó material fotográfico con el cual se contrarrestó la gran mayoría -por no decir todas- las afirmaciones falsas de estas supuestas víctimas».
A modo de ejemplo indicó: «Dijeron que trabajaban todos los días una cantidad de horas exagerada, sin descansos, sin francos, pero de golpe se ven fotos paseando en un dique, en un río, compartiendo la pileta en la casa del country en San Francisco, todos disfrutando, pasando las Fiestas».

«Decían que no se podían comunicar con sus familias, que no podían usar redes sociales, pero aparecen fotos de redes sociales, junto a familiares mientras eran miembros de la comunidad. Fueron más de 100 fotos las que acompañamos con sus respectivas descripciones, fechas y relatos de lo que estaba ocurriendo en ese momento», agregó.

Luego expresó: «Se los acusó de ponerle nombres bíblicos a las supuestas víctimas. Y fue cada uno quien eligió el nombre que quiso tomado de la Biblia porque representa su religión. Sacado de contexto parecía una supresión de la identidad. Pero se trata solamente de una forma diferente de pensar o de vivir que no por eso deja de ser válida. También se decía que se los obligaba a cortarse el pelo y hay fotos con peinados normales, cuando hay otras religiones que directamente tienen el pelo al ras, como el budismo, donde es un mandato obligatorio.

«Fue todo sacado de contexto y utilizado en contra de mi defendido, algo que tuvo una connotación muy negativa», aseguró.
Argüello recuperó su libertad el viernes pasado y «se pudo reencontrar con su familia y sus afectos. Obviamente está muy afectado por la situación, quedó muy mal por lo sucedido. Fueron dos meses en los que tuvo que tolerar la vida dentro de un penal y todo lo que implicó afuera a nivel opinión pública. Se hablaba de hechos gravísimos que si fueran ciertos ameritarían un fuerte reproche de parte de la sociedad, pero quedó probado que las acusaciones no eran ciertas».

Mochkofsky aseguró que Argüello retomará su vida habitual: «El cree fervientemente en eso, en su forma de vida en comunidad, en sus valores y los de su grupo».

Fuente: La Voz de San Justo