El 28 de Junio se conmemoró un nuevo Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+, pero a 51 años de la Revuelta de Stonewall el colectivo sigue sufriendo la violencia.
El 28 de Junio de 1969 ocurrió la Revuelta de Stonewall, manifestación que dio origen a los movimientos LGBTIQ+ en todo el mundo. La causa que prendió la chispa fue el cansancio de quienes asistían al bar “Stonewall Inn” de las violencias policiales desencadenando la rebelión. La misma, no solo iba dirigida a la policía sino también a toda la sociedad que agredía y marginaba al colectivo diverse.
A pesar de que pasaron 51 años de aquella revuelta histórica, y de los grandes avances en derechos que conquistamos para nuestra comunidad, las violencias hacia el colectivo continua.
En comunicación telefónica con Alejandra Mansilla, referente de Libres y diverses (MuMaLá); nos comenta sobre un nuevo Día Internacional del Orgullo y acerca del registro nacional de violencias hacia la población LGTBIQ+ que realizaron desde la organización.
«Desde la organización MuMaLá, venimos trabajando de manera sostenida desde hace varios años, con cuestiones que tienen que ver con los registros que todavía no se asientan en una política oficial; entonces las organizaciones nos damos con el trabajo de poder resolverlo«. comenzó Alejandra y continuó: «Desde hace un par de años, entendiendo la realidad que vivimos como colectivo LGTBIQ+, sentimos la necesidad de registrar y poder diferenciar en cuanto a estos registros. Es decir, las mujeres también son víctimas, pero no solo las mujeres. En lo macro, las disidencias sexuales seguimos sosteniendo algunos patrones de violencia que vienen hacia el colectivo«.
Alejandra agregó: «Nos alerta mucho que todavía siguen sosteniéndose patrones de violencia hacia nuestras identidades sexuales» y se refirió al hecho de violencia que se vivió el fin de semana en el Parque Sarmiento: «Al ver esto, hablamos de la violencia que sufrimos como colectivo y como comunidad. No es en vano que haya pasado en Córdoba y que haya sido en esta fecha, cuando venimos resignificando nuestras luchas y justamente estos hechos de violencia no han dejado perplejos. Es por eso que como comunidad, venimos sosteniendo nuestras reivindicaciones mas que nunca«.
Para finalizar, en base a los casos de violencia Alejandra nos dejó su reflexión: «Nos parece fundamental que este registro sea la pata o un instrumento de poder concretar políticas públicas que venimos sosteniendo hace tiempo. La necesidad de la inclusión laboral de las compañeras, la necesidad del acceso a la salud de calidad. Hoy todavía nuestros cuerpos trans se siguen sosteniendo gracias a la voluntad de unos pocos profesionales. Ni hablar del acceso a la vivienda, hoy muchas y muchos compañeres, siguen sosteniendo estas viviendas comunitarias en hoteles, casas o departamentos. La pandemia nos hace servido mas para darle luz o mostrar estas cuestiones que venimos identificando, entonces nos parece fundamental como las organizaciones nos damos las estrategias para poder dar visibilidad a estas cuestiones«.