Desde el Pueblo de La Toma, la comunidad comechingona sigue reclamando por la casona que perteneció al curaca Villafañe. Villafañe prestó su propiedad en comodato al gobierno para una posta policial, y finalmente fue expropiada; lo cual comenzó una lucha de años por reclamos del territorio que debe ser develto.
Además, en el terreno está el Tacu , un algarrobo gigante de 500 años que se rige en el centro de la casona y tiene un valor espiritual y patrimonial inmesurable en la zona.
«Este domingo a las 19 horas se realizará un festival virtual (como todos los años) para seguir con este reclamo«, explica Debo, integrante de la comunidad. Con artistas invitados, músicos, poemas, intervención y participación de otras comunidades. «Queremos ser escuchados; hace 4 años pedimos que por favor se nos entregue nuestros espacio», remarca.
«Tenemos historias de vida muy diferentes pero tenemos un punto de unión de persecución», explica Debo con respecto a la diversidad que les integra en la Provincia. Pero ahí están; los pueblos originarios, luchando por lo que les pertenece. Y el espacio, tal como explica Debo «no se trata de propiedad privada; se trata de recuperar territorio para la comunidad».