Entre los principales reclamos, Jiménez mencionó la recuperación salarial, el pase a planta permanente de trabajadores precarizados, la reincorporación de despedidos y la reglamentación de la ley 10.889. “Muchos de nuestros compañeros no cubren la canasta básica. La mayoría tenemos dos o tres trabajos para llegar a fin de mes”, explicó.
En relación a los despidos, denunció que “fueron todos sin causa, con legajos limpios y puntajes de más de 8,50”. Además, criticó que haya “contratos por tres meses y sueldos congelados desde hace un año”. Según Jiménez, “la provincia no quiere reconocer los títulos de grado” y eso también impide avanzar en la reglamentación de la ley.
“Es una protesta, no un luto. La consigna es vestir de negro porque Llaryora nos está asesinando el salario”, expresó Estela Jiménez, referente de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Salud (UTS), en diálogo con Radio La Ranchada. “Está haciendo que la miseria golpee la puerta de cada uno de los trabajadores de Córdoba”, agregó.
La representante de UTS también se refirió a la fuerte presencia policial en el Hospital Rawson, donde desde hace más de 50 días permanece instalada una carpa en reclamo por los despidos. “Llaryora quiere imponer el protocolo de Patricia Bullrich. No quiere que se visibilice la protesta, por eso manda a la policía a amedrentar a los trabajadores”, denunció.
Desde el sector aseguran que el conflicto no tiene una solución a la vista y que seguirán en las calles para que “la sociedad de Córdoba vea lo que está haciendo el gobierno provincial».
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