El Gobierno tomo la decisión de no aumentar las tarifas de los servicios durante el mes de julio. La medida contempla la estacionalidad, es decir, el mayor consumo debido al invierno. También se detiene el aumento de combustibles. Por otro lado, desregularizaron los precios de los servicios de telecomunicaciones.
El Gobierno suspendió las subas de gas, luz y combustibles, anunciadas para el mes de julio. La medida se establece para los consumos hogareños del mes que viene y, dependiendo de la fecha de facturación, en principio la mayoría de los usuarios lo pagarían en agosto.
La Secretaría de Energía explicó que, si un usuario consumió en julio lo mismo que en el mes anterior, pagará exactamente el mismo monto. Si el consumo disminuye, el usuario pagará menos.
Cabe recordar que la factura de junio contempla el aumento anunciado en su momento. A principio de este mes, el Gobierno nacional modificó los topes de consumo máximos subsidiados y las bonificaciones sobre los precios mayoristas de energía eléctrica y gas natural para los usuarios N2 (ingresos bajos) y N3 (ingresos medios) de acuerdo al Período de Transición establecido por el Decreto N° 465/24. Lo que implicó un golpe en la economía de los sectores más empobrecidos.
En el caso de las tarifas de gas tampoco los consumos de julio tendrán aumento. Es decir que el usuario pagará exactamente lo mismo que en junio, siempre y cuando su consumo sea igual.
Luz verde para los aumentos en las tarifas de Internet, celulares y cable
El Gobierno deja sin efecto normas emitidas entre 2020 y 2023 que establecían controles de precios para servicios de Internet, telefonía móvil y televisión por suscripción.
El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) anunció este jueves la derogación de una serie de resoluciones que regulaban los precios de los servicios de telecomunicaciones, en línea con un reciente decreto presidencial que permite al sector ejecutar aumentos con total libertad.
La medida, publicada en el boletín oficial, deja sin efecto normativas que establecían controles para los aumentos de los servicios de internet, telefonía móvil y televisión. Has ahora, el tope permitido para los aumentos era entre el 5% y el 10% mensual.
Con la nueva disposición, las empresas de telecomunicaciones recuperan la capacidad de fijar libremente sus precios, algo que el organismo regulador justifica como necesario para «salvaguardar las reglas que permitan el desarrollo de un mercado en competencia».
Se espera que la liberación de los controles de precios impacte en las boletas del mes de julio.
Fuente: con información de Ámbito Financiero