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Nuevas formas cooperativas para potenciar la salida postpandemia

El Instituto Nacional Asociativismo y Economía Social organizó (INAES) realizó una videoconferencia con destacadas referentes de la economía social y solidaria de Canadá.

El encuentro contó con la presencia de Beatrice Alain, Directora General del Chantier de l’économie sociale de Quebec y Marguerite Mendell, co-fundadora del Instituto Karl Polanyi y miembro fundadora y honoraria del Foro Global de Economía Social. Por el lado argentino fueron oradores el presidente del INAES, Mario Cafiero y Ariel Guarco, miembro del Directorio del instituto y presidente de la Alianza Cooperativa Internacional.

Durante el encuentro, se compartieron reflexiones sobre el desarrollo asociativo, y las características que tienen estas experiencias en Argentina y Canadá. Solo en la región del Quebec funcionan 11,200 entidades de la Economía Social con 10 millones de usuarios. Asimismo, el auge de las más de 300 nuevas cooperativas de solidaridad que reúnen en una sola entidad asociativa a diferentes clases de asociados: productores, consumidores, trabajadores y entidades de apoyo de diverso tipo (estatales, sindicales, empresas privadas convencionales, etc).

Uno de los ejes centrales del encuentro giró en torno al rol que la economía social puede jugar en nuestros países y, a nivel global, en el marco de la situación extraordinaria que se ha generado por la pandemia de covid-19: “Los municipios y provincias pueden coaligarse con las organizaciones asociativas para sostener el trabajo y la economía local mediante la promoción de cooperativas de desarrollo local que integren a diferentes y diversos actores a partir de la filosofía de la comunidad organizada, priorizando a las personas, a los derechos de las y los trabajadores y rechazando las prácticas fraudulentas que son tan prevalentes en la economía del mercado y que muchas veces culminan en el vaciamiento de nuestras empresas y la fuga de capitales”, sostuvo Cafiero.

Por su parte, Ariel Guarco afirmó que “esta pandemia está desnudando las enormes fragilidades que tienen los modelos actuales para responder a los desafíos globales que estamos enfrentando. Hay un gran debate alrededor del mundo acerca de la falta de capacidad institucional para dar respuesta a problemas».