El uso de lenguaje claro en resoluciones judiciales es una tendencia que sigue creciendo. Adopciones, condenas penales y hasta fallos por daños y perjuicios contienen párrafos redactados para ser entendidos por las partes.
Con el concepto de acercar la justicia a las personas es que se está llevando a cabo la posibilidad de redactar los fallos, resoluciones en lenguaje comprensible. Hay varias razones para que las resoluciones o sentencias sean incomprensibles y tiene que ver con dificultades en la comunicación de los actos de gobierno del Poder Judicial: sentencias, resoluciones, autos y providencias llenas de latinazgos y en lenguaje complicado de descifrar. Además ciertos/as abogados/as también continúan redactando para un grupo reducido de personas y no así para las partes.
El juez Guillermo González Zurro, titular del juzgado nacional en lo civil Nº 109, afirmó en un artículo titulado “Sentencias y lenguaje claro” que el acceso a la justicia “comprende el derecho a la información en lenguaje claro” y propone “expandir los límites herméticos del lenguaje judicial, cerrado a especialistas y excesivamente formal”.
Advierte, además, que el lenguaje claro no es sinónimo de fácil: “Mantiene la dificultad de los problemas propios del Derecho, no suprime ninguna información esencial, es preciso. Pero todo ese contenido se intenta comunicar de una manera más comprensible, más legible y clara”.
Del mismo modo, la abogada Mónica J. Graiewski sostuvo en “El lenguaje claro en el ámbito jurídico” , el uso de lenguaje claro “es estratégico”, ya que a las personas que requieren sus servicios “ya no les resulta suficiente que les expliquemos superficialmente la estrategia que seguiremos o qué significa lo que dice la demanda que van a firmar. Ahora quieren entender de qué se trata (…) También necesitan entender las sentencias quienes no fueron partes del juicio”.
Al realizar un relevamiento en distintos tribunales del país podemos verificar algunas situaciones respecto a la utilización del lenguaje comprensible:
Provincia de Buenos Aires
En septiembre del 2019, la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires, representada por el Ministro Sergio Torres, firmó el Acta de integración como miembro adherente a la Red de Lenguaje Claro Argentina (ReLCA). La ReLCA fue creada con el objetivo de promover en los organismos del Estado y demás instituciones públicas el uso de un estilo de redacción simple y eficiente en el contenido de los documentos y actos públicos para facilitar la comprensión y el acceso universal a todos los ciudadanos. En torno a ese objetivo, la Suprema Corte de Justicia, a través del Instituto de Estudios Judiciales, impulsará y promoverá un programa de formación sobre lenguaje claro en el ámbito de la administración de justicia provincial.
Ciudad de Buenos Aires
Esta iniciativa también fue adoptada por el Juzgado N° 10 en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo del juez Pablo Casas, que confeccionó y publicó una guía del lenguaje claro y estilo. El fundamento de su redacción es que «el debido proceso exige que toda persona pueda defenderse, probar, impugnar, obtener una decisión que esté debidamente motivada, y otras garantías esenciales que permitan considerar que el trámite y la decisión judicial son válidos»
El documento incluso aconseja evitar el uso de frases como “a sus efectos”, “autos y vistos”, “cédula de estilo” y «córrase vista”, entre otras.
Córdoba
-En la causa “Vega Silvana Elisa c/Saire Pablo Walter Ceferino- abreviado daños y perjuicios- accidente de tránsito- tram. Oral- (exp. 7962694)”, el juzgado de 36º Nominación en lo Civil y Comercial de la ciudad de Córdoba, a cargo del juez Román Abellaneda, hizo lugar a la demanda de la actora por daños y perjuicios contra el demandado, aduciendo que, en una maniobra imprudente cuando sacaba su auto a la calle los embistió, provocándole al auto de la accionante graves daños. Condenó al demandado y la aseguradora a pagarla suma de $99.800 en concepto de daños materiales. El fallo fue redactado en un lenguaje “claro y comprensible para todas las partes”.
-En autos “Alarcón, Víctor Joaquín p.s.a. abuso sexual agravado continuado, etc”, la Cámara 2° en lo Criminal y Correccional de la ciudad de Córdoba incorporó párrafos de lectura fácil dirigidos a la víctima de un abuso sexual. Una adolescente de 15 años de edad. El Tribunal condenó a diez años de prisión a Víctor Joaquín Alarcón, un joven de 25 años que abusó sexualmente de su hermana, por parte de madre, cuando ella tenía entre nueve y trece años de edad. Para dirigirse a la víctima, la jueza titular del Juzgado, Mónica Adriana Traballini, utilizó lenguaje claro.
Estas realidades nos permiten visualizar que ya se está comenzando a implementar en nuestro país la redacción de resoluciones, sentencias, autos de manera comprensible y adecuada a las partes pero aún queda mucho trabajo por hacer y sigue siendo un desafío para algunos tribunales de Córdoba como del país.